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33 Fray Emiliano de Cantalapiedra / .... •••• Si el viaje era sólo hasta Machiques solían regresar el mismo día aunque un poco tarde. Pero si tenía que ir a Maracaibo no regresaban hasta el otro día después de mediodía. Yo me quedaba toda la mañana en ayunas para poder comulgar cuando el sacerdote regresase y celebrase la Misa. En aquel tiempo la disciplina del ayuno eucarístico mandaba estar en ayunas desde la doce de la noche del día anterior. Alguna vez me tocó estar en ayunas hasta las dos de la tarde. Pero se hacia con gusto con tal de recibir a nuestro Dios Sacramentado en la Sagrada Hostia, el don más grande que Jesús nos da en esta vida. Después de enero de 1953 vino la nueva disciplina del ayuno eucarístico: una hora si se trataba de alimento líquido y tres si era sólido. Desde entonces era más fácil observar el ayuno eucarístico y uno podía trabajar duro hasta que llegara el padre para tener la Eucaristía. Yo seguía con los trabajos de la casa, de la escuela, de la Misión. Los aserradores seguían sacando estantillos y había que traerlos a la Misión. Como no había obreros disponibles, los traía yo. Me ayudaban algunos yukpas voluntarios, incluso mujeres. Así pasaban semanas y semanas hasta acarrear la última pieza. Pero pasado un tiempo había que repetir otra vez la misma tarea. Como decía aquel que cantaba "camino y no termino el cuento de nunca acabar". De todos modos había que seguir adelante aunque los hombros quedasen pelados y adoloridos por bastante tiempo. Los yukpas nunca me dejaron solo, cuando no iban unos iban otros. Yo traté siempre de recompensarles como podía. La cuestión se demoró más de la cuenta porque las otras ocupaciones no se podían dejar y sólo estaba yo para hacerlas. Una cosa que nunca se suprimió era la clase de mañana y tarde. Los tres misioneros de Ayapa pedimos a Monseñor Turrado, nuestro Obispo, permiso para cambiar el nombre de la Misión y, en vez de Santa María de Ayapa ponerle Divina Pastora de Ayapa. En realidad, oficialmente el Centro Misional no estaba registrado y Monseñor no vio dificultad en hacer el cambio.