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138 DEL PECADO ORIGINAL, millones de veces mas admirable que la del reloj mas fino y com- plicado? Confuso y aturdido al ver y tocar con todos sus sentidos las maravillas de la naturaleza que él no comprende, ni puede es- plicar, esclama: confieso que el Omnipotente vá mucho mas allá que mi entendimiento. Ciertamente no cabe en mi inteligencia el poder de Dios: muchas de sus obras en la naturaleza son para mí arcanos impenetrables: Quam incomprehensibilia sunt Judicia ejus! No de otra suerte , decia Salomon, que era un misterio incom- prensible para él la conducta del hombre en su adolescencia. Los sublimes conocimientos de que Dios habia adornado su alma , MO eran suficientes para entender el uso que en el camino de su vida haria de su alvedrio aquel jóven. El clima de su patria , el influjo de los ejemplos desde su nacimiento , los cuidados de su educacion, la fisonomía de su persona , la inclinacion de su génio, el carácter de su espíritu, nada de todo le presentaba datos fijos para anunciar con certidumbre el resultado de sus operaciones, su término y.su fin. Veía aquel gran rey, y nosotros lo vemos cada dia, que unos jóvenes empezaban bien y acababan mal; otros empezaban mal y acababan hien : estos eran ignorantes y se hicieron sábios; aque- llos eran instruidos y murieron fátuos; unos tenian un génio dulce, una condicion amable y una conducta virtuosa, y «luego se-trans- formaron en petulantes, ridículos, soberbios y viciosos: á otros de una inclinacion feroz, de un génio cruel y un desórden casi univer. sal de costumbres, los vimos humildes, mansos, morigerados y de una heróica virtud, Quién entenderá estos prodigiosos misterios de la divina gracia ? Quam investigabiles vie ejus| El mismo apóstol San Pablo levantando su espíritu á los bienes. dela gloria, dijo: que ni el ojo vió, mi el oido oyó.,-ni-caben en el corazon del hombre las grandes cosas que Dios tiene reservadas-en el cielo para los que le temen y aman, Qué altura tan prodigiosa la de aquel bello lugar, qué estension tan inmenso, qué capacidad tan asombrosa , qué hermosura tan inesplicable! Pero cuántos la habitan? Por.cuánto tiempo serán felices ? Todo:es misterio. Quién me dirá. .lo.iomenso de aquella altura , de aquella estension , de aquella vastísima: é incomprensible longitud? Quién-dará alcance á su interminable eternidad? Cuncta: res difficiles non potes eas espli- “are sermone (Eclesiastes, cap. 1. Y. 8.) Si cuanto ven los ojos en-la naturaleza es unprodigio, si cuan- to roflexiona el entendimiento :en las Operaciones de la gracia y en los elernos premiosque Dios justo y santo reserva para los virtuo-
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