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MELCHOR ¡Salve !... ¡Honores al Rey Sulamita que en Belén tan humilde ha nacido! ¡ Tu cabeza tendrá una corona y tus manos un cetro divino: Rasgará esa corona tus sienes, será el cetro de débil cañizo, y en la hora más triste, los tuyos más entonces serán abatidos. BALTASAR ¡Salve... salve... Tú, de los cristianos, Cristo... venga a nosotros tu reino! del confín Trevisondo hasta a Roma, han de honrar a tu nombre los pueblos, y a los hombres... la paz... la ventura... que la Virgen ya ha vuelto de nuevo- (84), de Saturno... ya el reino ha tornado y vendrá otra edad de oro... con ellos. CRISTO EL NiS0U Yo soy Jesús, el hijo de Dios vivo, nací para sufrir y dar la vida, porque los hombres vivan y se salven, como rezan al fin las profecías. LA VIRGEN Y ahora, tomad sus pañizuelos pobres; ¡guardadlos por su amor !... dones preciados, y nuestra bendición llevad con ellos, ¡tan pobres... nada más podemos daros! (Ella les da los puñales y se van.) V. La huída a Egipto (Aquí entrará San José conduciendo un asno en el que va sentada María con el niño.) MARIA Descansaremos aquí, bajo el ramaje tendido de estos árboles frondosos,