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E Y ed AO Un escritorio Fray Pacífico transcribiendo e iluminando (121) FRAY PACIFICO Crece la oscuridad. Solo una línea... y, ya por hoy, concluyo mi trabajo. ¡ Aquí otra vez está el terrible nombre del Señor, y aun antes de tocarlo... ¡ nombre que el hombre tan ligero dice! b tomo la pluma, en calma la acicalo; ' ni una mancha siquiera ha de notarse, ni ha de quedar un tilde menos claro, al trazar la palabra misteriosa! h Así voy, casi todo, trabajando El sin cesar, de San Juan el Evangelio. ¡ Posible es que de los mismos labios del Santo Evangelista, en los que Cristo por ventura besó, fuera arrancado el pavoroso Apocalipsis. Pinta (122) espectáculo horrible el libro, cuando A A a su final parece como el sol en un eclipse al sepultar sus rayos! Mas, ¡ay de mí!, ¡cuando medito aquella visión divina, y sus renglones trazo, TT me lieno de pavura a la terrible NR maldición, que, al versículo sagrado y postrero, se lee, cual si del juicio la trompeta escuchase ! ¡ Dios, en tanto... El me perdone, si una tilde dejo (123)