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diciendo la misma, oracion. Entonces viene a sus discipulos. y ies dice: Dormid lo que resta, y descansad;. ved, ilegé la hora, y el Hijo del.hombre va.a sex cntregado en ma- nos de los pecaclores. Despertad, vamos; mi- rad, que ha llegado el que me entrega. Y estando él todavia hablando, pronto llego Ju- das, uno de los doce y con él numeroso tro- pel de gente! con espadas y palos, de parte de los principes. de los sacercutesy de los an- cianos del pueblo. Y el traider les habia dado contrasefia, diciendo;: Aquel a quien yo bese, él.es: prendedle. Y de seguida, llegandose a Jestis, dijo: Salve, Maestro, y le beso. Y Jestis le dijo: Amigo a qué vienes? Enton- ces llegaron y echaron mano-a Jesus, y le PESneS i ac n estoee ds: Jos de Jestts, alargando la mano, desenvaind su CAPR, ida e€ hiriendo al,siervo del. sumo sacecrdote, le quité la oreja. Entonces le dice Jestis: Vuelve tu espada-a su sitio, porque todos los que usan. espada, pereceran a. espada. 3 Acaso piensas que no puedo yo invocar a mi Pa- dre, y me traera aqui ahora mismo mas de doce. legiones de angeles’ Pero zcémo se cumpliran Jas. escrituras, de que tiene que suceder todo.eso?. Entonces dijo Jestis a las turbas: Como contra un ladv6én habéis salido con espadas.y palos a engenae cada dia es- taba ante vosotros sentado en el templo. en- sefiando, y no me prendiste‘s, Mas todo esto ha pasado para que se eumplan las escritu- 235