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La humanidad; al nacer, crece esta humillacion, debiendo respirar por primera vez en un albergue de animales; sin embargo, estas acciones estaban ocultas, y sdlo eran tes- tigos de ellas Dios que las ejecutaba, y su augusta Madre; pero al penetrar por los umbrales del templo, la abyec- cion 4 que el Verbo eterno se sacrifica, se descubre en toda su latitud; al encarnarse, hace Jesus el sacrificio de su gloria increada, pues la oculta de tal modo, que por algun tiempo se hace inferior 4 los angeles; al nacer, re- nuncia 4 cuanto puede esperar el hombre en este mundo, .como son las comodidades y los honores; pero al presen- tarse en el santuario, su sacrificio es de sangre y de tor- -mentos. Cuantas palabras oigais al sacerdote que lo pre- senta en las aras, no son més que el eco del razonamiento — _imperceptible que pasa entre el Padre Eterno y su Hijo: mas de mil afios hacia que el sagrado pavimento era re- gado con sangre de victimas, y ninguna fuera bastante para apagar el fuego de la ira de Dios; al entrar por pri- mera vez en este lugar sagrado, el Salvador del mundo mo pudo ménos de conmoverse, contemplando los horren- dos estragos del pecado y la nulidad de las ofrendas hu- manas; pero ent6nces se cumpliera lo que diez siglos | antes cantara David al son de su lira. Jesus se dirige 4 su Padre, diciéndole que ya que los holocaustos por el pe- cado no le habian agradado, El se presentaba dispuesto a hacer su voluntad. Desde este momento el hombre entra en la via de la eterna salud, pues Jesus se condena a pa- decer hambre, frio y desnudez, y 4 sufrir injurias atroces, denuestos injustos, crueles persecuciones, infamias no merecidas, agonias mortales, traiciones alevosas, azotes y espinas, bofetadas y escarnios, dolores y oprobios y muerte de cruz. Ofrecido Jesus de este modo en sacrificio, se hizo, segun San Pablo, causa eficiente y primaria de nuestra salvacion, si iiamos en noun mismos el cuadro de sus acciones.