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ES Mas no estaba circunscrita su mision & sola la digni-— 9 ; dad de engendrar al Dios que ‘debia humanarse al llegar | oa : la plenitud de los tiempos, ni 4 fracasar la cabeza orgu- “ F llosa de Lucifer; aquella en que mas brillaria seria la ae adopcion que haria esta Mujer, recogiendo 4 la humani- — dad como al niiio desamparado, enjugando sus lagrimas, abriéndola sus maternales brazos, estrechdndola en su seno, alimentandola con su propia sustancia , y, por fin, ‘salvandola del destierro y de la muerte , por medio de la cooperacion 4 la Redencion que su Hijo hacia. : _ Alretirarse Adan mustio y cabizbajo de la presencia pe de Dios, y despidiéndose de la dulce mansion del Paraiso, a no le quedaba otro consuelo que el fijar su vista en el a Redentor futuro y en Ja Virgen que lo habia de engendrar. oe Sus hijos recibieron de El esta doctrina y esta creencia; 2 ; y animados con esta fé, atravesaron las edades antedilu- a vianas, esperando el momento dichoso de ver a aquella — : Mujer, que, mejor que Eva, se llamaria Madre de todos los 4 vivientes. En una palabra, amados mios: cuando el mundo oe estaba en su infancia, sin tener quien lo conservase y at salvase de mil males que debian caer sobre él, se dejé oa entrever en lontananza la Madre de Dios, como Madre de . ‘los desamparados , como refugio de los desdichados que cayeran en la orfandad por culpa de sus primeros padres. Esta es, sefiores, la mision amorosa de Maria; éste el ___ titulo tierno y consolador que resoné entre las amenas flo- restas del paraiso; ésta la unica creencia que conservé el k linaje humano en medio de los innumerables errores 4 que cE se entregé despues de la culpa. El diluvio destruye la x humanidad , no salvandose mas que ocho almas que reci- y bieran este dogma de los mismios hijos de Adan: de estas : ocho almas sale nuevamente su descendencia, y crece _ desmedidamente ocupando toda la tierra ; el Oriente, el ~ Occidente, el aquilon y el austro se ven inundados por naciones que han salido de Sennar despues de la confu-

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