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436 ciada por todos los Profetas, y representada & lo vivo en Jonas: Signum Jone. Y estos milagros atin subsisten hoy dia; diez y nueve siglos ha que se realizé la Encarnacion del Verbo en la casa de Maria, y esta casa existe contra el torrente de devastacion que ha mudado en cada década Ja faz de la tierra: primer milagro. Jesus envié 4 sus Apéstoles 4 toda la tierra, sin prestigio, ni riquezas, ni apoyo, y se levanté contra ellos la ciencia, el poder, los ejércitosy las masas, y esto no obstante, los Apdstoles plantearon en todo el mundo la fé de Jesucristo: segundo milagro. Tres siglos enteros empleé Roma en seducir, en castigar, en atormentar y degollar cristianos, y cuando creia cefir su frente con el laurel de la victoria, se en- contré vencida, y el Cristianismo quedé triunfante: tercer milagro. Los herejes empezaron 4 atacar la Encarnacion y los demas articulos en Simon y en Cerinto, contempo- raneos de Jesucristo; siguié Arrio, continué Nestorio, prosiguieron los maniqueos, los albigenses y los pela- gianos; vino Lutero, se levanté Calvino, y piden consu- mar sus secuaces la obra de destruccion, quedando tan intacto y puro el dogma como el sol al aparecer en Oriente: cuarto milagro. Alzdse despues el deismo, el panteismo, la ineredulidad, empleando para atacar 4 la Religion el sarcasmo, la risa, el desprecio, el pillaje, el asesinato y cuantos medios ha podido sugerir la filosofia impia , y la Religion canta siempre la victoria del Gélgota: quinto milagro. Los cristianos se han apartado de los caminos de la verdad, practican lo que les agrada, miran la moral con indiferencia, obedecen 4 la Iglesia en lo que no les es oneroso, porque esta Madre ha abandonado sus rayos, y con todo, nadie puede concluir con ella, ni el tirano, ni el hereje, ni el incrédulo, ni el indiferente, ni el apatico, ni el incendiario, ni el sacrilego: sexto milagro. Esa misma incredulidad de nuestros dias es el mas patente milagro, porque el incrédulo niega la existencia de los angeles