BCCPAM000591-3-11000000000000

«As ae aquellos mismos que tantas demostraciones hicieran de amor y veneracion. Espiré Jesus, es verdad; el pontifi- cado y la magistratura hebreos lo han condenado 4 la ig- - nominia y lo han tratado como 4 un sedicioso y asesino, como 4 un enemigo de Ja Religion y de la republica; pero entre tanto Jesus tiene ya fijado su asiento en la paz, y su habitacion es en la santa Sion, & donde no puede llegar el furor de los enemigos: Factus est in pace locus ejus , et habitatio ejus in Sion. Pocas han sido las horas que el Justo ha pasado entre ~ las manos de aquellos malvados que lo han escarnecido y baldonado, crucificado y muerto; en ellas Jesus les ha permitido que mesasen sus cabellos, que escupiesen su rostro, que cubriesen sus ojos, que hiriesen sus mejillas, que lo azotasen y atraillasen como al mds vil de los reos; mas Jesus espiré; Jesus llegé al término que El mismo habia prefijado; sus enemigos podran estar abrasados atin contra El y respiraran furor, pero ya no les es per- — mitido tocar el santuario divino que ellos han profanado; manos puras, manos nobles, manos de principes seran las que se lleguen 4 la pacer victima para darla en muerte los honores que la impia Sinagoga le ha negado. en vida; ya no Ja desgarrara el cruel sayon; ya no la manchar4 el feroz verdugo, porque Jesus es Dios, y si ha querido entregarse por su propia voluntad al tormento de la cruz, tambien quiere que, en espirando, se le tributen los homenajes divinos. ; 4Quién no descubre en este paso la divinidad de la victima que atin esta clavada en el madero? Un discipu- lo, oculto por miedo de los judfos, no teme declararse despues de haber visto morir 4 su Maestro: un senador, entre los principales de Jerusalen, no tiembla presentarse a Pilatos y pedirle que se le entregue el cadaver de aquel Jesus que el mismo Pilatos ha condenado como 4 un fa— cineroso: los honores que va & tributar a los funerales de

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz