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Sobre la exéstencia de Dios. 51 quiera , y todos verán que uno y otro son eviden- temente falsos. ¿Quereis vosotros, hijos mios, tocar esta verdad con todos los sentidos ? Poned sobre una mesa ó en qualquier otro sitio , una losa de mar- mol. No la movais , ni permitais que otro la mue- va: vereis que ella se está quieta siempre. Pasa- rán dias, años , siglos , y ella quieta ; de suerte que si en toda la eternidad una fuerza extraña no la saca de su inercia Ó natural estado de reposo, quieta é inmovil permanecerá eternamente. Pues ahora , carísimos , respondedme : el sol es mate- ria : la luna , las estrellas y la tierra son materia; ¿ quién dió movimiento á los globos celestes y reposo al globo terrestre? Todos ellos son mate- ría : la razon y la experiencia demuestran que la materia nose mueve sino la mueven; ¿quién, pues, mueve á los que se mueven ? Acabemos glorio- samente de confesar , que hay una Inteligencia eterna, justa y omnipotente, que crió enel tiempo oportuno la materia : que la dió indiferencia para el movimiento y el reposo: que la mueve segun el propósito de su adorable voluntad, sacando de la nada todas las cosas con-su-omnipotenciaz con- servandolas , dirigiendolas y ¡encaminandolas á sus fines , conforme á las leyes que las dió. Con- fesemos que los cielos nos dán noticia de su glo- tia, y el firmamento dice, qué es obra de sus manos : que todos .los elementos afirman ,* que Dios los hizo:5 y el.mar y los rios , las: fuentes y los lagos , la tierra-y- los frutos , los animales, las aves y los peces, todos publican:su existen- Ga
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