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286 Sermon - XL, Quando todos sabian sus obligaciones , advere tia que las cumplian , ó distaban un solo paso de su cumplimiento ; pero quando la ignorancia habia tendido su negro: maato. sobre el sacerdo= cio y el imperio ,:56 Dios, y á quánta distancia miraba el Santo á los hombres en punto de sus obligaciones! Á la manera dé ciegos palpaban en todas partes tinieblas , y si algunos acompañan= do, su ignorancia con la indocilidad , la presun- cion-y «la pertinacia , trataban de distinguirse de los otros , luego se desviaban;, y: caían en los mayores absurdos , yen las heregías mas abo» minables. Consideraba la conducta de los. Nico- laiwas , Marcionitas , Arrianos: Pelagianos , y otros sectarios , y veía que su ignorancia en los adorables misterios de la santa Religion, su vanidad y presunción en distinguirse , y su per- tinacia en.no someterse con docilidad á las le- yes de la infalible , católica y santa madre la Iglesia , los precipitó en: sus extravagancias , sus errores y sus heregías: Ignorantia mater erro- rum est; ignorantia vitiorum nutris (lib, sec. $ yn0R.) La. misma verdad que el Santo veía en-su tiempo , vemos nosotros con dolor en nuestro siglo. Qualquiera hombre juicioso , que medite atenta, y. virtuosamente- la Religion christiana: que contemple sus adorables misterios , y refle= xione sobre,su hermosura:, la reputará como un abismo de grandeza ; de magestad., de orden, santidad y economía. Quanto mas compare sus sagrados dogmas con los preceptos de los filóso=