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8 0. uuuSérmon MIL * tras almas, la diferencia entre la virtud y el vicio, las “recompensas del -bueno y «dos.:castigos del malo? ¿Qué podremos pensar de los-que se per- suaden que la “materia es capáz de pensar , y que los hombres no se diferencian en el sér que los aníma de los animales y las fieras? ¿ Y qué diremos de los que confesando la existencia de Dios ,de-despojan de. suiprovidencia y justicia, formandose un Dios á su manera sin recompen- sas y sin castigos? ¿Un Dios que mira con indi- ferencia los.crimenes mas vergonzosos y las mas heroicas virtudes? ¿Un Dios,.en cuya: presen- cia es lo ¿mismo ser. un malvado que un ¿justo? ¡ Blasfemos escandálosos ;, la razon reclama con» tra vuestros detestables principios! Un sentimien- to natural é inextinguible los combate y los des+ miente. El fundamento ruinoso sobre. que leyvan» tais 'el sistéma: loco:del: fantasma de vuestra re» ligion y'se desmorona y: deshace al primer en- cuentro de la sana razon.-No ,- mi-Dios santo, justo , eterno y omnipotente , mi alma :no tendrá la suerte que vuestro mas criminal enemigo tra+ ta de asignarme. Yo siento en mí mismo, y seria tan infelíz como él, si no lo sintiese que: este-di= vino soplo que me:aníma, no es el mismo-im= pulso que mueve al bruto ,-y al automato. Ya siento, que el: sér que piensa en mí, es «diférente del sér material, y que la.ruina de éste no ar- rastrará trás sí la ruina y fin de aquel. Yo sien= to , que un sér que se levanta hasta Vos , que os conoce , os adora y trata de amaros, no es ma= teria , ni efecto de la: materia; no: es movimien=