BCCPAM000543-1-10000000000000

AOL CA! poseye E pe 1INentL el pue DON! el mavor esmero en tenerlas tflodas, Fué casto en el cuerpo y en el alma, 1 ñ A sf ecmaaba ucho de huir de IS SILIOS arriesgados, y de las familiaridades pe hero Por esto, a mnmque e tuvo a rias veces en las prineip les Ciudades ganas se del Reino, públicos, mM menos quería JP a ver al vIO en sus ] 15€ 0S emos edificios magnífic en donde se conservan pintura estatuas, .Ó pre ciosidades antiguas y nas del exámen de l lamente re taba la: vista de estas co Ss sino de LO los los bjel 13 que po Í dían subministrarie ménos de- cente siendo e este punto muy pre ¡ venido, $ MH vit 11 1111 1 1 nand ¡ A medio que, como dice el confirma la experience: La cho para preservarse d mientos, y para guardar razon con toda aquella dili fencl píritu Santo nos encurga Por el mi p mo fin huía de toda conversacion con mujeros., 888, —De sus ojos parecía, en espe su ministerio le pre cisaba tratara tanta gente, no lener uso eribir, y si la na cial desde que por 81110 para leer Y e turaleza se los dió grandes, vivos, per | hermosos, ol los hermose 1104 picaces, más con su modestia. Jamas se vérl ficó que lo fijuse en el rostro de al guna mujer, y aun en el de los de su sexo. los ponía como de refilon ó es cape (1). Cuando las madres 4 impul os de la devocion y concepto en que le tenían, se arrodillaban con sus hijue () Décidme, ¿le visteis suso 8ns grandes rasgados ojos sino cuando ha Muuna € lam cion? ¡ Qué pacto tendría hecho con ellos, no d go para no ponerl somo Jab en el rostro de las virgenes, sino en cosa alguna de la tierra ! (Gra altema, p. 17) Era tal la pureza y mos del P. Fr. Diego, que no levantó jamas los a para mirar á persona de distinto sexo, siendo cier to que cuando le pedían la mano alargaba el santo hábito. (Proe. p 76) — Era extraordinaria su resistencia para hablar especialmente con muje res, aun cuando les decía el santo Evangelio no sólo eva imposible notar en él el más leve de fecto, sino que daba ejemplo de castidad y de pu reza, y el más libertino no osaba en su presencia decir la más bgera palabra qu pudiese ofender ) para qué ¡es ujese 10S l N 1NcSehos, a indispensable inmediacion á ellas lo alarm 1 en extremo y esto se ep- nocia en € part lar rubor que cubría su semblante; cerraba sus párpados v econ ng lar cautela es ondía la mano, al dársela á bes: en el say 11 del manto dejando burl cuanta di higeneia ponían para tener el consuelo de besarla. Quería el Beato que se le acércasen los parvulitos, miraba en ellos dibujados los p seedore del y prohibía les impadi sen ir á él, Los recibía con apacibi- lidad, los as aba econ dulzura. los acariciaba y regalaba cruces, se las hacía en la cabeza y frente; pero se notó que jamas tocó al rostro de nin- Al ¡ Instándole.en Málaga una señora á que gun: ma, viese la rara hermosun ra de una hija de tres á cua ro años, que el Beato había bautizado, se re- sistió bastante, pero al fin por no dis gustaria la tomó en los brazos, les miró un poco, y poniéndole la mano en un carrillo, dijo estas palabras: « Coma- « dre, tanta hermosura no está bien en « la tierra, en el Cielo se perfeccio » La chiquita estaba buena, « nará y estará segura. se criaba robusta, pe 0 al tercer ó cuarto dia, su alma voló á la gloria ¡Cuántas veces contaba la señora este suceso que creyó profel zado por el Beato Diego! y añadía con lágrimas:,« yo tuve 1 de perder á mi Josefa por lo imprudente que estuve en hacer que mi compadre la mirase > (1) vista la Ksta custodia de = 1 observó igualmente respecto Dic nuestrs S w. (Pr p. 278), En 1 ) el tie y 1 te trató tan nm a ment p ' vi ) | s los ten en una pos l de p 108 serv Pb Í 8 1 Uy le stas € Pos 18s en ma Zas l Ss fin de Forna (Genoves), Lezo de s na candor y se dijul Calla, tonta te si n ul 1 mM ta, estarías viuda ; I Die- consiguió « i Efectivamente 3 dias fué ataca ta, qu n el últim 1 do á que puede llegar padecía aun despues pasados en tan terrible sufrimiento 20 años, su marido D. Nicolas Luis Koops Consul del Rein de Holanda, expecialisimo bienhedho le la O den, y sostuvo por n IETOSO SU escape s tuvo su vida en tan grave penoso padece pruebas que tenemos de la virtud de dicho Lego nos dan fundamento á creer que de s n 1 aquella expresion.