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232 OCUPACIONES DEL llacion no es perfecta, por el son- rubor y tal vez desaliento con que me presento despues en el púl- pito ete. por aquel motivo etc. En su: ma, Padre que las I oj( de mio, me parece tareas de mi ministerio no me impiden el trato TS con Dios, sino mi su- ma miseria y la dificultad que en todo hallo para hacerlo con toda la per- feccion que exige la materia. Este es un bosquejo de aquel mapa, pero tan mal dibujado, que no sé si V. lo en- tenderá por mi mala explicacion. 7133, — « Por último, quiero que v. sepa que jamas se ha retirado mi co razon de su enseñanza, ni entibiado en la resolucion de obedecerle, en medio de las tentac ones en que me ha puesto la sospecha de que se disponía v. y dis ponía las cosas para darme de mano eto. No es peque ño golpe el que me he 1 dado oirle á V. mi parte: y es no fácil de explicar el au mento que ha tomado mi en Dios (á mi parecer, de que si V. engaño en esta espe rauza viese todas mis cosas como ellas son, y yo no sé decirlas, que todo sucederá prosperamente. Ya cuento estas experiene las y suceden que me resigno perfectamente con sus divinas disposiciones, sin que sea una más que otra: y así me ha ahora. La falta de vista me eribir malísimamente. Pensé escribirá V. a correo tirado, pero me lo impi- dió un sermon en el mismo dia enco- mendado la tarde ántes. Deseo á V. cumplida salud; y postrado a sus pies con todo mi corazon, le pido mil per- dones de mi desconfianza, vano temor. Perdóneme V. por el a mor de N. $, Jesucristo y continuando en. mirarme con la caridad que Dios le ha dado, no se canse de mí, ni de la estupidez y estolidez de este bruto para aprenderse sus instrucciones Deme V. su santa bendicion y sus 0- raciones. » ] 134. — Y en otra carta tratando de su no lejana muerte y de su interior dice (1): « Despues que esc ribí á v. mi última, intenté repetirle prontamen- te Otra: mas me lo impidió la sidad de repetir porque ni los baños ni los refrescos bastaban á templar el grande incendio varias de sucedido hace es- sospecha v nece- otras tres sangrías, () Carta de Ronda, 26 Agosto 1800, BEATO EN 180U Dios mé voy continuando los re- Bien me persuado que sin milag volver yo á ta perfecta robustez y sanidad de 1 los de la sangre. Ya gracias á hallo mejor y frescos, ete. FO no puedo ños pasados, y por lo tanto miro mis malecillos « como una especial cordia del Señor, para que no de mí la memoria de mi la necesidad de prepararme con tiem po para ella. Esto me llena de res, porque no trato de con la verdad y asunto tan interesante 130. « La misericor miseri aparte muerte econ temo- prepararme eficacia que exige un «dia del Senor es tanta con esta su ingratísima cria contínua 11n- tura que á pesar de mr terior disipación se ha dignado con- cederme un grande amor á la virtud santísima de la Fe, con aleuna luz de lo que es la fe práctica, y de debo esmerarme en dejarme llevar de su infalible enseñanza en todo Es tan- que en el fondo de mi advierto un consuelo y gozo no pe- queño siempre eun acto de virtud imperado de la fe; v. e. se inclina la voluntad á alguna cosa defectuosa ó indiferente no pre to esto, alma que se me propone ul cisa; se me recuerda: la Fe enseña que esta inclinación debe ó conviene mortificarse: y al punto aquella mortfi cación Ó negacion se me propone gus tosísima etc. Si yo fuese fiel á divina luz, no dudo que aprovech: mía en la perfeccion lo que por mi culpa ble desidia no aprovecho. Esta misma me produce la necesidad de la ora E para el santo Ministerio de la predicación que se me prepara: E yéndome muy frecuentemente á la me moria la espada sin puño con la voz: esa es la predicación sin la oracion. Cada vez que predico se aumentan esta este conocimiento y estos reciéendome poco el unir intencion, mi alma ete Nuestro Señor Jesucristo en el fin de su predicación ete, 736. — « Me parece e A si guiente: no obstante lo Po , por si para algo conduce. El Rel Ñ 1 confieso blo es bas dese JS, pa entonces mil con la de acto y eioso con quien aqui me tante docto, muy práctico en el con fesonario y de un contínuo en la direccion de almas, me ha re ferido que una de singular aprovecha- miento que dirige, asistiendo. en su ejercicl )