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| | | | / | ” 170 CAPÍT tantemente destrozado peor que Job en el mul dar Y con esto e dice to do. Si Dios no me remedia perezeo en mi miseria, ( mpadezcas: y P. mio de tanta Como es, y en penñese con su Maje tad POP 11 CONVersion, » CAPITULO XLVL Misiones de Utrera, Moron, Osuna. (1788 525, El 16 de Febrero de 1738 empezó el B. Diego la Mision de U trera que duró nuev dias, v no fué sin fruto, si bien no hubo cosa extraor dinaria, De ella escribe (1) « Ln esta Mision no se advierte fruto ni con MOCiOn como en otras: estoy resigna do en la voluntad de Dios. hecho cargo que por er el que Oy sucede asi. » Luego pasó á Moron con el mismo objeto predicando tambien en esta villa nueve dia De pues bizo sólo ocho dias de Mision en Osuna por no per mitirle má tiempo su quebrantada salud. Oigamos lo que dice el Beato de esta Mision de ( suna (2): cAl tercer dia de aquella Mision me repitió el accidente del año pasado contraido en mi viaje; él me hizo abreviar la Mision en los diez dias y reducirlos 4 ocho, que hice con bastante fativa alijerando de trabajo cuanto fué posible. Me vine aquí la semana Santa, tan echado áa perder del e tymago y faltas de fuer Zas que el Mártes santo fué necesario dejar la Cuaresma 6 su abstinencia, mé puse en cura y aunque á Dios gracias estoy mejorado, sigo aun con el dolor y tan ruin que ya estoy ex chuido de mi Pp, Provincial, porque no estoy para viajar delas Misiones pro yectadas para esta primavera, ni para las tareas de las Misiones. » 526. — Viéndole tan falto de salud, y que á pesar de los cuidados que procuraban tener de ella, nuestro Beato continuaba siempre molestado de sus dolencias, sus Prelados le obligaron á un descanso más lareo mandándole se retirase al Convento de. Casares Vigamos al santo Misionero (3) Lo () Carta de Utrora 3 Febrero 1788 (2) Carta de Bonda. 15 Abril 1788 (3) Carta de Ronda, 20 Mavo 1783, gro alguna mejoría en mis males, á Dios gracias, mas no deja de repetir el de- a ¿ZQuna loredlo que estos dias « con a más frecuencia, bien que no con mucha fuerza, pero me estorba para eseribir, ¡0er ele, y por esto suelo apucarme á alguna labor de manos, para excusar la ociosidad y las melancolías de ocio so, ete. 11 dia de la Ascension estuve en Ubrique con mi P. Provincial: tra. tamos de mis destinos, y resolvió que hasta nueva órden suya me fuese al Convento de Ca res que es en este Obispado y allí viviese totalmente re- tirado sin trato alsuno, aplicado úni- camente á regular observancia de nues tras leyes, á la oración y al estudio, privándome de toda predicación y ta- reas del ministerio hasta cobrar fuer- zas en el espíritu y en el cuerpo. sta determinacion me ha llenado mucho el interior y causado bastante con suelo de modo que nada he tenido que ven cerme para aceptarla pues veo mi ex tremada necesidad y creo que para mi remedio lo dispone Dios así. 27. - «He sabido ya el nombra miento del Sr. Caballero | de Córdoba v la venida del P. Eufrasio con los títulos honrosos que me trae de N. Riño P. General, el que dice lo eseribió de su propia mano y con bas ra Obispo tantes lávrimas de ternura ete.: Dios se lo pague. Por esto y otras razones me estrecian á que no excuse el admi tirio, mas mis Prelados ó la Provincia nada me han dicho ni sé qué haya de €ste particular, Estoy cierto que mi ?. Provincial no ha tenido ni aun in flujo indirecto en él. Había pensado aceptarlo, quedándome en el mismo modo de trato en cuanto al asiento en Coro, Refectorio, ete.. mas haré lo que me mande, » 029, El sabio Director del B. Die go por este tiempo quiso dar á su duiscipulo más apremiantes consejos y serias amonestaciones sin duda más para probarle y mantenerle siempre fervoroso y humilde, que por ereérle decaido de espíritu. El Beato respon dió (1): « Dia octavo de lá SS. Trini- dad recibí la muy apreciable de V. de 15 de este, y aun ¡ue acababa de ll gar de des Ir Misa lhiegso che ví la nota que traía de no leerla hasta hacer lo 1) Carta de Ronda, 27 Ma o 1188