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su antigua casa de Nazareth, no solo se cumplié la profecia en que Isaias dijera que Dios montaria sobre una nube lige- ra, en la cual como en‘una carroza entraria en Egipto, sino Ja de Oseas que decia que Dios llamé de Egipto 4 su Hijo ‘, y las que los Profetas habian anunciado sobre la santidad del Hijo de Dios, 4 quien todos habian llamado Nazareno, es de- cir santificado y consagrado al Sefor *. Pero lo que mas. resplandece en estos acontecimientos, es el modo admirable con que Dios confunde 4 los soberbios del siglo, y se burla de todas sus maquinaciones: porque con la fuga de la Vir- gen al extrangero y con haber venido despues 4 vivir 4 Na- zareth quedé por una parte burlada la maliciosa politica de un principe astuto é impio, y por otra se manifesté mas.-tar- de cudnta es la necedad de los hombres que se empefian en - querer destruir la verdad. Sin duda Herodes queddé ufano y satisfecho de haber dado un gran golpe de estado: y cuan- do sus satélites le digeron, que no habia quedado un solo nifio en las comarcas de Belén, sus cortesanos segun usanza de 3 los palacios, se congratularian con él, diciéndole que era un 4 { gran politico, pues de un golpe habia cortado de raiz mil gérmenes de rebelion, que podrian sobrevenir en sus esta- dos. Entre tanto el Nifio Dios, salvado en los brazos de una Virgen, iba seguro 4 Egipto, y la noticia de haber nacido el gran Rey que se esperaba, llegaba 4 penetrar hasta por los ae salones del palacio de los Césares de Roma, siendo Herodes a mismo por su crueldad el que propalé la gran nueva, no que- 4 dandole 4 él mas ventaja, que la de haberse convertido su nombre en padron de ignominia, hasta entre los mismos gentiles. . Cuando pasen dos décadas, este Nifio seré un séverk que a se dejard ver lleno de gracia y de verdad, atrayéndose por su doctrina y sus beneficios 4 los pueblos enteros, siendo esto una ocasion para que se levanten contra él los escribas y fariseos, quienes, por burlarse de él, lo Hamaron por mo- ' Cap. il, v. 1. 2 Matth. cap. 2, v. 23.

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