BCCPAM000540-5-09000000000000

49 sentamos los preliminares de nuestra escursión: en la segunda dibujé y puse á tu vista el mapa alegórico de lavida espir ¡tllal, te describí las regiones que atra- viesa el ignorado sendero de la perfección, y te indi- qué los principales caractéres de esas regiones desco- nocidas. En la tercera, te dí algunas señales para conocer si adelantabas ó no en el camino de la yir- tud. En las siguientes analizamos y vimos en qué consiste la perfección cristiana considerada en sí misma y con relación á nosotros, exponiendo á tu consideración el espectáculo de la lucha universal trabada desde el principio de los tiempos entre el bien y el mal, el vicio y la virtud; lucha en que he- mos de tomar parte necesariamente, peleando contra los enemigos de nuestra salvación. Para no pelear con ellos á ciegas, ni obrar sin conocimiento de cau- sa, dediqué la anterior á darte á conocer las fuerzas, posición, manejos y astucias de nuestros enemigos, desengañándote de la ilusión quesobre esto te habías forjado. En ésta te he manifestado el alcance de nuestras fuerzas y de nuestras armas, y con cuánta confianza debemos marchar al combate. Sólo resta tocar al arma, desplegar guerrillas y pelear, persua- didos de que es nuestra la victoria. Para derrotar por completo á nuestros enemigos, no hemos de atacarlos todos juntos, sino uno á uno, que así será menos penosa la lucha y más seguro el vencimiento. Yo dejoá tu elección el empezar por donde quieras. Anímate, pues, y si necesitas mis po- bres instrucciones, ya sabes que puedesmandar con toda confianza á tu afectísimo Padre, Fr. AMBROSIO.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz