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303 libato clerical? Y en caso afirmativo, ¿puedo abrazar para siempre ese estado, si me siento inclinada á él? Grandes incertidumbres y dudas tengo sobre esta materia, y deseo que usted me las aclare, antes de re- solverme, para tomar después una decisión irrevoca- ble.> En gran compromiso me ponen, cara Teófila, tus anteriores preguntas no sólo por lo difícil que es darles solución cumplida, sino porque tengo la con- yicción de que la respuesta que voy á darte tendrá muchos impugnadores y adversarios entre la gente no santa del siglo. Bien sé que mi solución á esos pro- blemas á de contentarte á tí; pero también sé que ha de disgustar á todo el que no está bien avenido con las sublimes enseñanzas del Evangelio. Mas, si por decir la verdad fuera impugnado Ó perseguido, me alegraré de ello, porque Jesucristo llamó bienaven- turados á los que padezcan persecución por la verdad y la justicia, añadiendo que la recompensa de los ta- les será grande en el reino de los cielos. Digote, pues, que sí, que la virginidad y el celibato católico, Ó sea la profesión de la castidad fuera del claustro, es un estado, no soloigual al matrimonio, sino superior, y mucho más perfectoque ól. Pero ten presente que ha- blo de la profesión de la castidad, del celibato católico, y no de esos celibatos paganos, inmorales y escanda- losos, que se usan hoy entre cristianos. Las palabras celibato y soltería (que son sinónimas en nuestra len- gua,) se toman en muy varias acepciones, y para evi- tar ambigiiedades será bueno explicar aquí el signifi- cado en que la tomamos. Primeramente te diró que la soltería ó el celibato noes el estado de virginidad, por más que se parezca mucho á él. Toda persona virgen, por regla general es célibe ó soltera: pero por desgracia no toda perso- na soltera es virgen, ni toda persona virgen tiene ver- dadero estado de virginidad; pues para tenerlo es menester abrazarlo por elección ó por motivos s0-