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AÑER GT Rs XXV Enseña á Teófila lo que significa el Adviento, y cómo ha de prepararse en él, para que el Niño Jesús nazca espiritualmente en su alma. EVOTA sierva de Cristo, é hija mía muy amada en su Divino Corazón: Quiera el cielo que cuando recibas esta, te halles múy ocupada en prepararle dentro de tu corazón una magnífica y primorosa cunita al Divino Niño, que dentro de po- cos días nos ya á nacer. La Iglesia Santa nos exhorta á esta preparación, repitiéndonos muchas veces en el rezo de este tiempo aquellas palabras de Isaías: Preparad los caminos del Señor, y haced derechas sus sendas, (1) las sendas por donde ha de venir á nues- bros corazones. Dichosa, por tanto, el alma fel que, revistióndose del espíritu de la Iglesia, se ocupa du- rante el Adviento, en preparar los caminos del Señor, y en disponer dentro de sí misma un portalito hu- milde, un blando pesebre, donde albergar al Niño Jesús; porque El, que no se dedignó bajar del cielo nacer en un establo entre animales para salyar al dea mucho menos se desdeñará de bajar á nues- (1) Isaías, xL, 3.

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