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“confia, que yo te he redimido. Si te unes é mi, “galdras de los males en que estabas, nocaerds en el “abismo, 4 donde ibas, y entraras en mi reino.” (1) Conoce tambien entonces el pecador su mise- ria, se abisma en su bajeza, se anonada al ver lo que Dios lo ama 4 pesar de su indignidad, y cuanto mas se humilla, mas amor le muestra el Corazon de Jesus. jDichosos mil veces los pe- cadores que lloran sus culpas. EJEMPLO. Santa Margarita de Cortona es un modelo de pecadores arrepentidos, pues habiendo pasado algunos anos en liviandades, tocada al fin por la gracia del Sefior, aborrecié con tanto extremo sus pecados, y lo que fuera ocasion de ellos, que, 4 no haber mediado el mandato de su confesor que se le prohibié, hubiera afeado con dilaceraciones sangrientas toda la hermosura de su rostro; y y: que esto nose la permitiera, castigéd su cuerpo toda su vida, mereciendo que Jesus la amase tan- to, que la llegase 4 preguntar lo que queria de él en premiode sys obras. Tanto ama Jesucristo i fos que, entrando dentro de si, detestan sus cul- pas y sirven al Setor en humildad. (i) 8. Anselm, Medit, de Redemptoy, cap. 6, 4 ‘ i { dai tinlanisdtts shia is tach in