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—264— do todo el bien posible: y por eso, amando Jesus .4 los escogidos con amor infinito y pudiéndoles proporcionar una gloria infinita, se complace en ofrecérsela y darsela en su propio Corazon, te niéndolos eternamente 4 su lado y sentandolos a su mesa en el convite imperecedero de los mora- dores del Cielo. {Qué gloria tan beatificadora, qué bien tan inestimable! Pero pongamos atencion en lo que dice Jesus a sus discipulos, 4 saber: que dispone del reino para ellos, como su Padre lo ha dispuesto para él. (1) ,Cudnto nose humillé Jesu- cristo para ganar el nombre, ante el cual se postra toda criatura? ,Cudnto no padecié y sufrié para entrar en su gloria? Pues persuadémonos que so- lo con la humildad entenderemos el valor de la adopcion que Jesus nos merecié, y conservare- mos en la tierra la gloria de ser hijos de Dios, y que solo reinaremos con Cristo, si ahora padece- mos como él. (2) MAximas. Como los Santos tenian tan alto conocimiento de lo mucho que vale la adopcion divina, y enten- dian que el que mas padecia por Jesucristo, esta- ba mas cierto de poseer la gloria de ser hijo de (1) Lue. cap. 22. v. 29, (2) 1.% Timot. cap. 2. v. 22.