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Se Esperabaa este Rey la hija de Sion, y se la di- ce que se alegre, se regocije y cante, porque ha de venir para ella este Salvador, pobre y mansi- simo. [1] Su condicion ha de ser tan apacible, que por ello tendré en él todas sus complacen- cias su divino Padre; porque no voceard, nise . oira de afuera. el sonido de su voz, ni quebraré la caia ya cascada, ni apagardé la estopa que humea, niserd triste ni turbulento; mientras que esta- blezca la justicia en la tierra. (2) Habian de con- jurarse contra él los malos, descargando sobre él ultrages y tormentos, para saber su condicion y probar su mansedumbre; [3] mas él no abrirja su boca, como oveja que es llevada al matadero y como cordero delante del que lo trasquila. (4) De toda esta mansedumbre habia de estar re- vestido aquel Corazon, que se presentaba al mundo, como modelo que habia de imitar, si que- ria este salyarse. Tenia este el candor por estu- pidez, y la mansedumbre por cobardia, no sa- biendo recibir un mal, sin devolverlo duplicado, ni pudiendo sufrir una injuria, sin desplegar to- . das sus fuerzas para vengarla. Mas Jesus le mostraria su Corazon suavisimo, para que apren- diese 4 mirar con indiferencia los menosprecios, Zacar. cay SP ane 42, v,2. 3.4. (8) i mas 19, ah) Isai. cap, 53. v. 7 ” ~~