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342 Exercicios ESPIRITUALES. EXÁMEN PRÁCTICO SOBRE LA VIRTUD DE LA HUMILDAD: Si el santo Job, siendo por testimonio del mismo Dios el mejor hombre que habia en su tiempo en el mundo , pedia al Señor que le manifestase sus culpas para arrepentirse y enmendarse de ellas , ¿con quán- ta mas razon, venerables Sacerdotes , deberemos no- sotros, que distamos tanto de su virtud, hacer 4 Dios la misma peticion? Quantas habeo iniquitates: scelera mea et delicta ostende mibi. ¿Con quánta mas razon deberemos nosotros pedir la divina luz para conocer los pecados que hubiesemos cometido contra aquella virtud tan necesaria á nuestro estado sacerdotal, pues sin ella no podemos conseguir en grado heroyco vir- tud alguna, ni aun llegar á conseguir nuestra sal- vacion? Aquella virtud, digo, que reprime todo deseo de honra, de ambicion ó estimacion, y nos ha- ce humillar conociendo nuestra indignidad, y la alteza y soberanía de nuestro Criador. Sí, seño- res, hablo ahora de la santa humildad , de la qual dice San Gregorio, que todas las demas virtudes sin ella son como un poco de polvo esparcido por los vientos: Qui sine hbumilitate virtutes congre- gat, quasi in ventum. pulverem portat. Exáminemos