BCCPAM000538-4-09000000000000
Dra NOVENO. 309 tantes para llorar su condenación y la vuestra ? Mi Dios, el corazon palpita , el entendimiento se atur= de , y el espíritu se estremece, al considerar en los braseros eternos 4 un Párroco , rodeado , afligido y atormentado de sus feligreses , 4 quienes no, predicó, no exhortó ni amonestó á dexar.los vicios y practicar la virtud :de-unos feligreses: que ¡pereciéron oprimiz dos. de sus pecados porque su pastor no procuró opor- tunamente apartarlos de sus desórdenes , ántes cón su omision , con su criminal silencio, los dexó enve- gecerse en ellos , y morir en ellos. ¡Dios inmortal! ¡Quántas condenaciones se amontonarán en la sola condenacion de un Párroco! Y si tan formidable y-es- pantosísima será su suerte por solo omitir su obliga- cion , por no predicarles, ni administrarles los santos Sacramentos , ¿qué será si pasó él mismo á precipitar- los , perderlos y condenarlos? ¿Qué será si él mismo por su mal exemplo y relaxada vida fué la causa de su eterna perdicion? ¡Ay! ¿Qué lengua de hombre ni de ángeles será suficiente para explicar tanta desven- tura? Dios misericordioso , Dios clemente , Dios de bondad infinita , tened misericordia de nosotros. Con- fesamos penetrados del mas íntimo dolor de nues- tras culpas, que ¿mpie egimus , iniquitatem Fecimus, et recessimus a mandatis tuis, Sí, Dios mio, he= mos obrado mal , pecamos : no somos dignos de lla-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz