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DiA NOVENO. 261 precision y claridad ? Pienso que no, venerables Sa- cerdotes. Esta misma obligacion repiten á cada paso los sagrados Cánones, y así el capítulo Quoniam di- ce: las rentas eclesiásticas son de los pobres , y es- tas no se han de convertir en otros usos que en los piadosos (1). En el capítulo Revertimini , se dice tambien : que el que no socorre á Dios en sus pobres le defrauda de la limosna, y hurta lo que se le debe; porque los diezmos y prifhicias son de Dios, como oblaciones propias de su Mages- tad (2). Severísimas son, venerables Sacerdotes , las con= minaciones con que hablan los santos Padres contra los clérigos transgresores de esta obligacion. Una ú otra daremos por no hacernos interminables. “Si haz lláre Dios alguno de estos, dice el PadreSan Am- brosio, muy tenaz en guardar, ó inmoderado en con= sumir estas rentas, á uno y á otro le despreciará: al uno porque las gastó superfluamente , al otro porque (1) Quidquid habent clerici pauperum est. Res Ecclesie, non quasi propriz , sed ut communes Deo oblate ¡cum timore, non ín alios , quám in prefatos usus y scilicet pios, sunt fide= litér dispensande. Cap. Quoniam, causa xv1. QUEST. 1, (2) . Cap: Revertimini ,¡a eadem causa.