BCCPAM000536-7-32000000000000
go verdadero no se contenta só- lo con evitar lo que directamente se opone á la amistad, si no tam. bién todo aquello que pueda cau- sar pesadumbre á su amigo. Hijos somos del Padre Celes- tial ¿cómo, pues, no evitar lo que sabemos positivamente le disgus ta? Siervos suyos somos ¿y no nos abstendremos de cometer las cul. pas veniales, sabiendo que tanto le desagradan? Por la gracia tene- mos la dicha incomparable de ser amigos de Dios y ¿osaremos ofen- derle aunque sea en cosa leve? Sin embargo ¡con qué facilidad tan asombrosa se comete el peca- do venial! ¡cuán sin remordimien- to se repite! ¡con qué sosiego se vive después de haberlo cometido! Como si no se hicera mal alguno, como lá ¿osa más inocente del
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz