BCCPAM000535-7-25000000000000

484 CARTAS DEL Beato DreGO que no disponga V. otra cosa. Mi mala explicación habrá sido la causa de no quedar V. satisfecho en el punto de mi conventualidad en Granada. Debí decir si no lo dije, que á mi P. Provincial le propu- se tenía orden repetida de mi director para pedir esa conventualidad, y negándose á ello el P. en tér- minos que casi no me dejaba hablar, le expuse que el motivo era el haber hecho juicio que me llama- ba Dios á la contemplación, á que de nuevo me respondió lo mismo, añadiendo otras expresiones, que á la comprensión de V. no pueden ocultarse. Es verdad que no le manifesté las cartas de V. pero no me pareció que esto fuese preciso, ya porque en substancia dije su contenido, y ya porque desde lne- go me pareció que oía con disgusto mi propuesta. La inteligencia de mi expresión que nada dije de lo que podía inclinarlo á esta determinación, no es otra, que la de haber callado todos los motivos que podía exponerle, que á mi parecer, no me per- miten la traslación propuesta por V. con el fin de quedar yo más seguro y libre de toda responsabili- dad. No obstante esto, cuando me vine ahora de Cá- diz volví á proponerle el asunto de mi mudanza á otro convento ó destino, exponiéndole que si yo da- ba algun mal ejemplo en la Provincia con perma- necer aquí, quería quitarlo. Respondió no sólo ase- gurándome de lo contrario, sino mandóme expresa- mente que continuase, porque esta era su voluntad, y que no volviese á tratar de este particular, Confie- s0 P. mío, á vista de esto y de cuanto conozco en la voluntad de mis prelados, nue no alcanzo á conocer cual haya sido mi omisión, mi que es lo que me resta por hacer. Me parece que he obedecido á V. exactamente y que por obedecerle como debo he desatendido no sólo los dictámenes de diferentes personas sabias, piadosas

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz