BCCPAM000535-7-25000000000000

Año 1784 23 tos; los que no conseguiría si le ocultase cosas de importancia. Por lo que repito, que no he dicho, ni por remota inteligencia que Nuestra Señora no ha- bía hecho las vestiduras d*. Ni tampoco he proferido una sola sílaba contra el Gobierno el Viernes de Dolores, ni otro día alguno; ni por ello me han amo- nestado, .corregido «. pues nada, nada, nada se me ha oido de esto, La citada proposición del Viernes Santo, la dije, porque antes de predicarla me acon- sejaron dijese algo sohre el uso de las rentas ecle- siásticas, por los mismos eclesiásticos. Yo soy en es- to tan detenido, como á V. le consta, por el decoro al estado. Ocurría lo de las terceras partes, y algu- nos días antes del sermón, me ocurrió de Improyi- so la especie de las vestiduras, con un fuerte deseo de hallar exposición que dijese lo que dije; la bus- qué, la hallé no sin trabajo; y aunque titubeaba en la resolución de decirla, al fin puesto en el púlpito resolví no callarla, proponiéndome por fin dos cosas: una llamar la atención de todos para el asunto de las terceras partes y que no hablasen contra la abun- dancia de rentas eclesiásticas. Útra, poner en cuida. do á los eclesiásticos para que por curiosidad leye. sen á san Lorenzo Justiniano y viesen lo que no debian olvidar. Esta es la pura verdad. Es cierto escribí en Sevilla á nombre de aquel Ca- bildo la carta de postulación al Sumo Pontífice en solicitud de la Beatificación del Venerable padre Pa- lafox, mas no se la remito á Y. porque no tengo co- pia, ni original de ella; todo se quedó ,en Sevilla y hasta que me la envien no puedo dirigírsela. Ya habrá V. recibido la carta de Hermandad que le remití con un religioso que salía para esa el mis- mo día; en ella pueden escribirse (1) cuantos quie- (1) Parece que debe decir inscribirse,

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz