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NOTAS Discretísimo es para reprender y para humillar este santo Abuelo: nadie como él sabe mezclar la amargura de la humillación con la dulzura del cariño, para hacer la medicina deseable y provechosa á un mismo tiempo. Bien dice el Beato Diego, que el Señor se lo dió para que fuera su guía, su sostén, su amparo y el aliento de su alma Dichosos los que consiguen en la tierra un Padre como este! Cuando esta carta llegó 4 Málaga, el Beato Diego se hallaba en Ronda, donde pasó del 2 al 2U de Septiembre con el P, Fernández, que estaba enfermo; y al volver á Málaga, escribió al P. González, notificándole la enferme- dad del Padre Fernández, y anunciándole su regreso á Sevilla para continuar las Misiones por este AÁrzo- bispado.