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64 comunion siendo de notar que, a fin de prepararse mejor 4 recibir tan. sublime Sacramento, durante el mes que precedié 4 tan dichoso dia, habia dividido su almuerzo con un pobre viejo que mendigaba en. la esquina del seminario. Habia en aquel tiempo en Tolosa un Padre capuchino espafiol expulsado de su pais por la revolucién de 1835; nuestro joven semi- narista tenia verdadero placer en ayudarle la misa y acompajfiarle por las calles de la capital, por lo que empezaron 4 llamarle “el pequefio capuchino.’’ Cuando hubo terminado sus estudios de 2.8 ensefianza, y no siendo atin sacerdote, fué nombrado profesor en el seminario menor de Esquile; mas tarde en 22 de Septiembre de 1850, fué ordenado de sacerdote en Tolosa: al dia siguiente celebro su primera misa y algunos dias después, en la fiesta de Ntra. Sra. del Rosario, pre- dicé su primer sermén oficial; digno principio. de una série nume- rosisima, tal que un historiador moderno, afirma que el P. Maria An- tonio es el sacerdote que mds ha protege de cincuenta afios 4 esta parte. El Arzobispo de Tolosa le nombré Vicario de Saint-Gaudeus, en donde hizo muchisimo bien durante los cinco afios que pertenecid al clero secular. Pero destinado por Dios 4 una vida mds publica y conociendo que su vocacién era para mayor perfeccion, cierto dia rogando 4 Dios ardientemente, mientras hacia el ejercicio del Via-crucis, que se la mostrara claramente, al llegar 4 la nona estacién oy6é una voz que le decia: “‘serds capuchino.”’ El 31 de Mayo de 1855 entré en el noviciado de los Capuchinos de Marsella; el 13 de Junio siguiente fiesta de S. Antonio, recibid el hdbito de N. P. S. Francisco, y el mismo dia 13 del afio siguiente hizo. su profesién, quedando de- familia en el mismo convento. Des- pués empezo su apostolado en las ciudades y aldeas, siendo sima- mente interesantes los hechos referentes 4 aquella época, de que se conserva memoria. En 1857 funddse el convento de los Capuchinos de Tolosa, de cuya fundacion fue el P. Marfa Antonio la piedra fundamental; alli . tuvo su residencia desde entonces, y de alli salié para evangelizar casi toda la Francia, sobre todo el mediodia. E] nombre del P. Maria. Antonio-va unido inseparablemente 4 uno de los mds célebres’ santuarios del mundo, el de Nuestra.Se- fiora de Lourdes. Habiendo escuchado de la boca misma de Ber-