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69 todo otro detalle. Es la Resurreccién de Jesucristo, Ella es la que hoy canta nuestra S. Madre.la Igiesia, ella por la que se viste de ga- la y hace sonar las armoniosas voces del organo; ella por la que se despoja de sus vestituras de luto y se viste de gala; ella por la que os convida alegraros y regocijaros en este dia. Teneis por tanto de- recho a preguntar: gqué significa, qué importancia tiene esa resurrec- ci6n? Os voy a dar la respuesta en breves palabras. 1.° Demuestra Ja divinidad de Jesucristo. En todos los momentos Jesucristo se present6 como el Mesias, el enviado del Padre Eterno al mundo. El Sefior fué demostrando esta divinidad, En cieria ocasién S, Juan Bautista envid dos de sus disci- pulos que dijeran a Jess: ¢Eres tu el gue hasde veniro hemos de esperara otro? En este mismo momento, nos dice S, Lucas, Jests curé a muchos enfermos y libert6 a muchos del espiritu maligno, y y hecho esto, les dijo: «Vo/veda vuestro maestro y decidle: «Los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos se limpian de Ja lepra, /os sordos oyen, los muertos resucitan, los pobres son evangeliza- dos.» (1) Sin embargo de tantos milagros Jesucristo quiso |lamar la atenci6n sobre su resurreccién y S. Pablo dice que seria vana nues- tra fé, si Jesucristo no hubiera resucitado. gQué hay, pues, de espe- cial en la resurrecci6n? La virtud, la potencia y la dignidad de los hombres no se cono- cen en solo mirarlos u oirlos, asf como no se conoce la fuerza ger- minativa de una planta con solo verla; pero si se conoce en la ac- cién, 4veis que un hombre lee y escribe bien?, le teneis por sabio; éveis que una semilla v. gr. un grano de trigo, de maiz brota fuerte de la tierra y produce una planta?, luego decis: es una semilla. ,Qué diremos de un hombre que muere, es sepultado y al tercer dia tiene una fuerza grande, levanta una enorme losa, sale resplandeciente del sepulcro? Que no es un hombre como los otros, que la muerie no ha podido corromper su cuerpo, que tiene en su mano el morir, que es Dios. Por esto la Resurrecci6n es prueba de la Divinidad del Sal- vador. 2.° Fortalecer la fé. La vida cristiana est4 sostenida por la fé. As{f como nuestro cuer- po no puede vivir sin respirar, asf tampoco nuestra alma puede obrar el bien sin la fé. La Resurreccién de Jess, demostrando su divinidad, es el término auténtico de su doctrina. Dios no puede engafiarse, por- que es la misma verdad; ni puede engafiarnos, porque es la misma bondad; por esto es verdad lo que nos predicé del cielo, verdadera su doctrina, verdaderos sus sacramentos, verdaderos todos los mis- terios que nos ha revelado. Ved por qué todo el Sto. Evangelio es verdad y nadie ha podido encontrar ni un hecho, ni una doctrina, ni () Matt., I, 13. Jesucristo de- muestra su di- vinidad ‘en va- rias ocasiones, pero sobre to- do en su resu- rreccion. Pero sobre to- do con resu- rrecién glo- riosa. Fortalece la fe. Si Jesucristo es Dios, cuanto di- joe hizoes verdad.

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