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67 prodigios, sin oir sus palabras de vida, sin sentir los latidos de su corazon arrebatador, fueron resfridndose poco a poco en su amor a Jesis, apagandose su entusiasmo un dia delirante, olvidando sus en- sefianzas divinas...... como el agua separada del fuego, se enfria po- cO a poco; como se oscurece el horizonte cuanto mas se aparta del sol; hasta que llega un momento en que el coraz6n que antes tanto amaba, queda frio, el coraz6n que se bafiaba en luz celestial, queda en tinieblas.... i é Y eso sucede a los cristianos de hoy, apenas han cumplido con la Iglesia huyen del templo santo, no acuden a oir la palabra divina, no vuelven a recibir los Sacramentos, se olvidan de Jestis, y esos co- razones que un dia comenzarona encenderse en el amor de Dios, a arder en llamas divinas, se enfrian, vuelven alo que antes eran; se- parados del fuego que es Jestis, esos corazones iluminados un dia por resplandores divinos, vuelven otra vez a las antiguas tinieblas, a la noche del pecado, apartados como estan del verdadero sol de justicia. Segunda causa: Vuelta a las ocasiones de pecar. 2Y aquellos judios apartandose de Jesucristo a dénde fueron? Fueron a parar a las juntas, a las reuniones, al trato de los fariseos y de los sacerdotes enemigos jurados de Jesucristo, donde se des- prestigiaba a Jesucristo y su docirina, se le calumniaba y se le consi- deraba reo de muerte y hasta abiertamente se conjuraba contra El. &4Qué duda cabe que los judios que le acompafiaron en su entrada a Jerusalén, permanecian mudos ante las calumnias y atin tratarian al- guna vez de defenderlo, aunque fuera timidamente? Pero !ah! el ejem- plo arrastra irresistiblemente..... a los seis dfas pedian su muerte. Y esos cristianos de quienes os hablo, que huyen de las iglesias y no se cuidan de oir la divina palabra ni de recibir los Sacramentos ¢a dénde van a parar? A los lugares que antes frecuentaban, a las mismas compafiias, a las mismas amistades, alas mismas diversio- nes, a las mismas locuras, alas mismas ocasiones, a los mismos peligros. Los primeros dias la conciencia protesta, el recuerdo de los propositos hechos los inquieta, pero no hay fuerza que pueda resis- tir la ocasi6n, y sucumben y vuelven a sucumbir, y se entregan al pecado cada vez con mayor desenfreno ef fiunt novissima hominis illius pejora prioribus..... ¢ Cual fué la suerte de aquellos judfos y de estos cristianos? Con una palabra se expresa: el abandono de Dios, la obcecacién del en- tendimiento, la pérdida de la fe, el endurecimiento dela voluntad, el mas horrible estado a que el hombre puede llegar en esta vida prin- cipio de un infierno eterno. Nosotros que conocemos la desgracia de aquellos judfos y de estos cristianos, desgracie que nunca sera suficientemente llorada y que conocemos las causas de tal desventura, los caminos que a ella conducen que son ei apartarse de Jestis y el volver a las ocasiones, evitemos las causas, huyamos de tales caminos. Vuelta alas o- casiones de pecar. *‘Consecuencias de la defecciéon: obcecacion del entendimie nto endurecimiento de la voluntad, abandono de Dios, Conclusién: no pager gee sus, no volver a las ocasiones. a a a msmenasinos SS
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