BCCPAM000327-3-35p2d000000000
33 á todo el mundo pagano, y colocar el estandarte de la Cruz sobre el Capitolio mismo, aunque se anuncia en las grandes poblaciones entregadas en el dia á- la disipasion y al lujo , con todo fuego y €nergia, solo fructifica en los pobre- cillos y menestrales que están fuera de la em- briaguéz que produce el lujo. En las clases altas y distinguidas, esto es, en las señoras y señores no fructifica la palabra de Dios, hablando por lo comun. Algunas veces se advierte en tal cual jóven dedicada á la moda, síntomas de conver- sion,mas se descubre al mismo tiempo en ellas un em- peño decidido por- colocar en las aras de su co- corazon el ídolo del mundo á la derecha del des- nudo Crucificado, dándole siempre á aquel una preferencia pública. ¿Será eslo conversion ? Hasta los.mismos apologistas del lujo se. yen forsados á confesar que este es un desorden que afemina á los hombres, enerva los ánimos, per- vierte las ideas, apaga en las mugeres los sen- timientos del pudor y de la probidad, confunde las clases y las gerarquias. Este vicio es el que trasporta los intereses de nuestra hermosa y pin- gñe Nacion á los reinos estrangeros, que como sj fuésemos Indios salvajes, nos. secan nuestro ,0ro y riquezas, y nos dan en cambio sus vidrios. y frio- 3 E 5 E 174 A f $ A , Er? f
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz