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240 EJERCICIOS ESPIRITUALES. tir al santo sacrificio. Si hallándose en su oficina la bus- case otra Religiosa para que fuera á confesarse, y ella respondiese, voy hermana al instante, porque ya lo es- taba esperando. y ahora mismo estaba pensando en ello; si desocupándose con brevedad de los asuntosde su oficio pasase al confesonario, se pusiese de rodillas y empezase á santiguarse, ¿no aseguraríamos todos que ella se con- fesaba con intencion virtual, aunque ni con palabras, ni en su interior profiriese un acto explícito de quererse con- fesar? Bien claro es que sí, venerables Religiosas, porque ella tuvo intencion actual de confesarse: ella para esto dejó su oficina, se llegó al confesonario, y sus potencias exteriores se aplicaron al fin que pretendia, aunque dis- tinta y claramente no lo explicase. Los autores convie-. nen en que además de la intencion actual y virtual que dejamos explicadas, puede haber otras dos que se llaman habitual é interpretativa. La primera consiste en haber querido hacer alguna cosa, como por ejemplo, oir la san- ta misa, y no haber revocado aquella intencion actual; pero despues la interrumpió con varios asuntos que no tenian conexion alguna con la misa, ni eran disposicio- nes para ir á ella: supongamos que á esta persona le dá un accidente y queda sin sentido; ¿qué intención halla- remos en ella? La actual no, porque está privada de ella por su accidente: la virtual tampoco, porque no conser- vó la actual antecedente con actos morales dirigidos al fin propuesto; no le queda mas que la intencion habi- tual, que puede hallarse no solo en una persona despier- ta, sino tambien aunque esté dormida, en un sano y en ún enfermo, en un loco y en un hombre de buen juicio. La segunda de estas dos últimas intenciones, dige que era llamada interpretativa, y no quiere decir otra: cosa que aquel concepto que formamos de que tal persona querria tal cosa, si pensara ó pudiera pensar en ella, y se hallara fuera de aquel apuro ó enagenacion de senti- dos en que se halla, Pongamos un ejemplo para que lo entendais con claridad. Hállanse dos hombres retejando