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DIA CUARTO. 139 superiores pusieron al abrigo de la inobservancia los so- lemnes votos: son unas leyes justas que dimanan de Dios, por quien y en cuyo nombre las promulgan los ler gisladores: unas leyes aprobadas por nuestra indefectible y Santa Madre la Iglesia, y cuya observuncia es yolyn- tad expresa del Señor. Es verdad que estas leyes parece que versan sobre cosas muy menudas; pero bástanos para observarlas con el mayor esmero saber que son voluntad de Dios. Pequeña cosa era al parecer comer ó no comer un poco de fruta; pero su transgresion perdió 4 Adan y á todos. sus miseros. descendientes. Pequeña cosa eran las espigas de Ruth, y el recogerlas cuidadosamente la hizo entrar en la genealogía del Salyador. Pequeña cuga era el nso de una mujer, pero fué. bastante para que Dios pusiese gn él los ajos y alabase á la que con él trabajaba, Poca cosa era un vaso de agua que David ofreció al Se- for; pero este sacrificio le fué á su Magestad muy agra- dable. Sean cosas pequeñas las que mande la constity- cion, como no hablar-en tales sitios del convento, ni.en tales horas, no comer fuera del refectorio, no usar sino de tal clase de ropa interior, y otras menudencias como es- tas; pero siempre quebrantarlas habitualmente será re- sistir 4 la ley, no obedecer á la voluntad del Jegislador, desatender las inspiraciones de la gracia, ahogar los te= mordimientos de la conciencia, contradecir á la volun- tad de Dios, y despreciar los medios de su propia santi- ficacion: Posumus el nollumus, decia San Berqardo: son cosas pequeñas, es verdad; por lo mismo podemos fácilmente observarlas, y no queremos, Mas dehemos ad- vertir, decia el Santo, que no sujetándonos ú estas me- nudencias por amor de Dios, sino quebrantándolas sin pena, sin arrepentimiento, habitualmente, y como ha- ciendo gala de su inobservancia, vendremos á caer en la impenitencia final, blasfemaremos contra el Espíritu Santo, y será inevitable nuestra condenación : Nemo di- cat in corde suo, levia sunt ista, non curo comp igere: non est magnum si in his maneam vental ¡bus minimis-