BCCPAM0001138-1-2900000000000

196 EJERCICIOS ESPIRITUALES. delante de Dios, y ofreciéndole la enmienda en lo: pre- sente y venidero; y ved ahí la penitencia interior, sin la.enal nadie se salvó jamás. Los ayunos de la órden, las vigilias , Jas mareraciones de la carne de muchas maneras que teneis por la santa regla. de vuestro insti- tuto, por vuestras sagradas constituciones, y por la di- rercion de wuestros padres espirituales, son otras tantas penitencias exteriores, que dignificadas con la recta in- tencion, dirigidas á un santo fin, y practicadas en gra- cia del Señor, os proporcionarán maravillosamente para mantener la fidelidad 4. vuestro celestial Esposp. ¡Ob cuán agradables le son las oraciones de un alma pura, retirada y penitente! ¿Qué podrá negar un esposo tan amable á.umas esposas tan heneméritas? ¿A unas esposas que por serle fieles abandonan el mundo, sus diversio- 109, $us placeres, su trato: que gimen al pié de su ado- able eraz, y luchan valerosamente contra sus pasiones? Los santos entendiap bien esta verdad, y confiaban mu- cho en Ja oracion de las vírgenes. Sirvan por todos, y para finalizar esta plática, aquellas preciosas palabras de Sen Leanilro á su hermana Santa Florentina: « Tú eres, »'¡oh Virgen! le dice el Santo, mi seguridad y defensa » delante de Cristo, mi Juez, y mi Señor: tú eres la »| prenda por cuyo respeto espero no ejecutará en mí sen- » tencia de muerte; tú eres la víctima y hostia sagrada » por-.medio de la cual confío purificarme de todas mis » € lpas, , No es de crear, hermana mia, que ha de que- » tar entristecerta, el que te escogió para esposa; el amor » que Gristo te tiene ha de ser mi indulgencia, ¿Cómo »podró. desconfiar del perdon, si mi hermana ha su+ » bido á ser esposa de mi Juez? Con tenerte por hermana »pospiravé yo en log cargos quese. me hicieren en aquel » tremendo juicio: la justicia que en mí se habia de ha- »cer, se templará, poniéndose tu castidad por interce- » sora. Por-usar el Juez de indulgencia contigo, me per- »donará 4 mí, y no querrá que perezca el hermano de »la que ha escogido por esposa: ten, pues, hermana mia,