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LOS CONVENTOS CAPUCHINOS DE ARAGÓN 113 Mientras se construía el convento, la primera residencia temporal de los Capuchinos fue una casa de la villa. El cronista da los siguientes datos: «Cuando los Capuchinos transitaban de los conventos de Huesca y Barbastro a los de Pamplona y Tudela, no se hospedaban en casa de Don Pedro Aznárez, sino en la de una señora principal llamada Dña. Ana Francés, cuya casa estaba situada en aquellos vagos de la Torre de Samper, que caen frente a la casa de Don Pedro Arbués y están contiguos a los graneros y corral de casa Mur. En dicha casa tuvieron los Capuchinos su hospicio; allí pusieron campana y reserva– ron el Sacramento y de allí se trasladaron al convento, cuando estuvo ya cons– truido»161. El año 1634, el fundador del convento, Don Pedro Aznárez, hizo su último testamento a favor de los Capuchinos(?). Otros generosos bienhechores fueron Don Miguel Bayetola y Cabanillas en el año 1662 1 ª1, Don Juan Guerrero y Agüero en 1689 191 y Don Florián Lucas Mulsa en 1699 1101 . Gracias a los testamentos de estos señores se fue realizando la construc– ción del convento e iglesia. Según noticias del cronista, el convento tenía este conjunto de dependencias: Celdas para los religiosos, comedor, cocina, enfermería, hospedería, biblioteca, oratorio, tribuna a la iglesia, ropería, calentador, soliador o solana en la parte alta ... 1111 . El titular de la iglesia era San Francisco de Asis y el sello conventual ostentaba su imagen, aun cuando en algún manuscrito se diga que el sello lleva– ba a la Inmaculada Concepción.11 21 2. Culto y actividades apostólicas La iglesia tenía varias capillas laterales dedicadas a San Antonio de Padua, San Félix de Cantalicio, San Francisco de Asís y a los santos Capuchinos Fidel de Sig– maringa y José de Leonisa. Estas últimas se hicieron con motivo de su canoniza– ción. La actividad de los Capuchinos en la villa de Ejea se cifró en el culto, confe– sionario, visitas a enfermos en el hospital y domicilios, y predicación popular por la comarca de las Cinco Villas 1131 . 6. «Lumen Domus», Pág. 1 de la introducción. 7. «Lumen Domus», Pág. 12. 8. «Lumen Domus», Pág. 18. 9. «Lumen Domus», Pág. 20. 10. «Lumen Domus», Pág. 25. 11. «Lumen Domus», Pág. 23. 12. CIAURRIZ, lldefonso de: «La Orden Capuchina en Aragón». Ed. La Editorial. Zaragoza. 1945. Pág. 26. 13. «Lumen Domus», Pág. 17.