BCCCAP00000000000000000001106
-232- Romanos; « Diréis que los ramos han sido quebrados para que seamos ingeridos nosotros.. , no te engrías, oh gentil, por eso, antes teme; porque si Dios no perdonó a los ramos, menos te perdonará a tí. ..si no permanecie– res unido aJesucristo porla caridad, serás también cor– tado, ya que, originario de silvestre acebuche, fuiste por la gracia injertado en el buen olivo». Se trata por tanto, de fijar bien en nuestra mente la idea de nuestra vocación a ser desposados eternamente con Jesucristo, el Heredero de las promesas, para ser su pueblo y cohe– rederos de su gloria. Este desposorio del Hijo del Rey y del convite a participar del mismo, tal cual lo describe la parábola que hemos oído leer, encierra una de las páginas doctrinales más hermosas y profundas de la re– velación cristiana, cuya ignorancia falsea en muchísimos el concepto y la vida de cristianos, aún permaneciendo adheridos al cuerpo de la Iglesia. Argumento apologético «El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros»: afirmación asombrosa que representa un verdadero, des– posorio de Dios con los hombres. Este contacto per– sonal con la humanidad unió para siempre una naturale– za humana con el Unigenito del Padre, levantándo a to– da la raza de los hombres, a una excelencia sobrenatu– ral. Pero el designio divino era que este acto se perso– nalizara en cada uno de los hombres de manera que Jesucristo Dios y Hombre se encarnara de alguna ma– nera en todos y en cada uno: así la incorporación nues– tra al Verbo de Dios sería concretísima y personalísima,
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz