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CONF. X.-DE LA FIRMEZA DE CARÁCTER 139 esa fuerza de voluntad, repito, necesita dos condiciones, o más bien resulta de la acción combinada de dos causas: una idea y un sentimiento. Una idea clara, viva, fija, po– derosa, que absorba el entendimiento, ocupándole todo, llenándole todo. Un. sentimiento fuerte, enérgico, dueño exclusivo del corazón y completamente subordinado a la idea. Si alguna de estas circunstancias falta, la voluntad flaquea, vacila" (6). En qué cosas debe obrar con firmeza el Superior. En todo lo que se refiere al cumplimiento de su deber. Pero hay algunos puntos en los cuales es más necesaria, por ejemplo: 1) En defender la justicia de la Provincia, del con– vente, del religioso... En no permitir atropellos ni de los extraños, ni de los propios, ni de unos contra otros. Hay maliciosos que se industrian para que se les deje obrar a su gusto y capricho. No os dejéis engañar ni ablandar por el temor. 2) En negar las cosas que van contra conciencia o en detrimento del alma del súbdito o de la Comunidad. 3) En establecer o conservar la observancia regular, no permitiendo abusos e intolerables relajaciones perni– ciosas, dispensas sin motivo, desórdenes en la casa. 4) Se exige energía y firmeza contra los súbditos que siembran cizaña, discordias, partidos, enemistades o amistadeg particulares... (6) Cfr. BALMES, El Criterio, cap. LIX.

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