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98 GUÍA DE SUPERIORES según Dios; y no por torpe lucro, sino por inclinación del corazón; ni como dominando despóticamente, en las que son porciones de la heredad (de Dios), sino haciéndoos modelos de la grey (forma facti gregis ex animo)" (10). Como se suele decir: Qualis rex, talis grex. .. San Buenaventura pone como cuarta ala del Serafín la ejemparidad de vida, y dice: "El Prelado, en efecto, ha de constituirse en norma que regule la vida de los demás, de suerte que aquello que enseña con palabras, lo confir– me con las obras, como el que enseña geometría señala, en la arena, las demostraciones de las figuras, a fin de que se entienda mejor lo que se explica" (11). Carísimos Superiores: sed los primeros en la obser– vancia, en las virtudes, en la santidad... 2. LA VIDA DEVOTA Todo religioso está obligado a tender a la perfección. Ninguno podrá conseguirla sin la vida devota, sin la pie– dad interna, sin el espíritu de oración. San Francisco dice "que los Frailes no maten el espíritu de la oración y devoción, al cual espíritu todas las demás cosas deben servir" (12). Sin la verdadera devoción interior y exterior, sin una profunda piedad, sin la vida interior saturada de unción divina, llena del Espíritu Santo, no se llegará a la unión con Dios, ni a la perfección de la caridad divina. Si esta vida es necesaria a todo religioso que quiere aspirar a la perfección, lo es más todavía para el Su– perior... (10) I Petr., V, 1-3. (11) De sex alis Seraphim, cap. V, n. 1. (12) Regla., cap. V.