BCCCAP00000000000000000000899

asociada a sus operaciones internas; Süiría porque no' podía, padecer, lín:1s– caha la cruz,, el sufrimiento; y cuanto más lo buscaba más lej6S huía, más me abismaba en la gloria y beatitud de Dios Uno y Trin:o, de su: divino y eterno beneplácito en el cual' vivía como sepultada, fuera de algunos ratos que se me concedía padecer algo. Pues bieti:': en esto es en lo único q:tte me parece no intervino mi Padfe verdad, al menos, directamente, a no ser que este impulso esté comprendidd en el asunto del dfa 23; núm. 3 {14.), así como la aparición del C:ordero, que refiete el capítu:lo, XXI (15'), p'árecíó impo· nerse directamente y tal vez obedeció a: la: doctrina de sa carta episfolal' de 1911 (16),, que aunque no fa leí, consetváiba- la' sustáinda, El P. Alfon'!'lo, sí intervino directamente para: sustraerme a Ia, influencia gloriosa y meter– me en la vía dolorosa, donde me encontraba cuando terminé de escribir la historia, velada, que el Padre me mandó (17]. A: veces me veía metida: de lleno en los dominios deF sufrimiento; otras' me sentía: transportada al seno de la divinidad, donde me parecía encontrarme en: mi verdadero cenh'o has– ta el nuevo eclipse. No he visfo claro todavía si el traspaso a la: vía dólorosa fué disposición.- de Dios o permisión, yo: me qu:ed!é peor que cuando el d':i– funto señor Dean me arrancó de los, brazos de- mi Dios Huma:nado pata ele– varme al seno de Dios. Peor, digo, porque al poc'o tiempd fué cuando empecé ff retroceder,· extel'iorizarme, etc; Pero el ~mor al Ca1vario y el llamarnfonto a compattir Ia pasión de Jesús no ha desaparecidio, e:idste y acompaña mis relaciones eon las divinas Personas, E1 capítulo- XXII1 de la obrita: (18)' completatá esta explicación, mejor dicho, los fres' capítulos últimos le orientarán: en este asunto y le darán a conocer mi vocación y destinos, que yo tal vez ignoro. f>or esto me parece convenientes remitirle el cuaderno del P. AlfoBso para· que lea los últimos capítulos, cuando tenga tiempo, y a mediados de septiempre mandíaré a fa señora Hermana de1 señor Capellán que se entreviste cow V. R. por' si quiere mandar con ella, y entonces' se copiará,,. ó' entre tanto puede la M. Presen- (14) El apartado de los puntos de contemplación propuestos por el P. Mariano pata el día 23 de los Ejercicios espirituales de 1917, a que la autora se refi'ere, és el sigúiente: "Unirse a Jesús que satisface, propiciace (!) e impetra de fü Santísima Trinidad." (15) Cfr. La vida espiritual, págs. 277 y sigs: (16) Cfr. Parte 1, pág. 291, nota: Una flor siempreviva, pág. 12. , (17) Es decir, el tratado sobre La vida espiritual. Cfr. P. MELCHOR DE PoBLADURA: Obra citada, págs. 105 y sigs, (18) Cfr. La vida espiritual, págs. 302 y sigs;: Nu:evas mani:festacifones de Jesús en el alma.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz