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tanda encer rados maestro y discípulo, sin ser vistos ni moles-– tad::s por ningún curioso -o profano. Un viejo y experimen– t ado piache enseña al di,cípulo y una doctora "piacha" adies– tra a la discípula a sobar al enfermo en las partes doloridas, a insufia:rle, a mascar tabaco , a rociar con saliva de tabaco ma::cado los miembros doloridos y a foicar la maraca de pia– chear sobre el paciente, sentándose para la insirucción sobre un asientico de madera que tiene la figura de un caballito. Las maraca::. son de taparo, algunas pequeñas y otras de regular tamaño, adornadas frecuentemente con cintas de seda. y borlones de algodón de diferentes colores, en las que meten, para que suenen bien, piedrecitas, granos de maíz y frijol, cuentecitas y i: emillas de "maraquita". A veces no es el piache o piacha quien em:eña a los apren– dices , sino el mismo espíritu que los instruye direct amente: durante el sueño. Los así amaestrados, salen más aventaja– dos en el arte de piachear. En todo caso, durante el apren– dizaje, mascan mu cho tabaco fuerte, que los marea, embo– rracha y alucina. Mientras ejercen, ya de día o de noche, según la grave– dad de la dolencia, les habla igualmente el espíritu y les pide, para que la curación sea rápida y eficaz, vacas, ovejas, chivos, caballos y rn.ulas de tal o cual color, y de no dárselas, de nin– guna manera puede sanar el paciente, porque así lo pide y exige el espírit u del doctor o doctora. Las insignias empleadas para la curación son la maraca, el típico guayuco, arropándose t ambién frecuentemente eón una cobija, para que tengan más fuerza y eficacia los ensal– mas cantados, que ac-cmpañan al toque acompasado de la ma- 10aca; insuffamiento a los miembros doloridos; so-bamiento de . los mismos; aspereión con saliva del tabaco mascado, y aún le chupan fuertemente con la boca, cuando el espíritu se resiste a salir del cuerpo del enfermo. Piaches y "piachas" llaman, a veces, en su auxilio, a otros mj _s poderosos ("junta de doctores"), y si éstos no pueden curar al paciente, lo dan por desahuciado, y es fácil que se muera o que, por autosugest ión, se ponga bueno en_ breve tiempo. - 58 -