BCCCAP00000000000000000000754
«):IIARAN ATHA». j EL SEÑOR VUELVE! SE ENCIENDEN MUCHAS LUCES ROJAS ... La situa,:üón de deterioro en que nos hemos me– tido insensatamente desde hace años, necesitaría de muchísimas páginas para ser descrita adecuadamen– te. Aquí no podemos hacer esto; bastará con ofrecer unos apuntEs que den cuenta sobre lo fundamental. (La inmensa mayoría de nuestros contemporáneos viven bien despreocupados de todo esto: sólo atien– den a multi;;,licar sus comodidades, disfrutar y con– sumir... ; pero son ya tantas las 'luces rojas' que se encienden en señal de aviso, que no todos pueden seguir distraídos.) El peligro se detecta sobre todo en cuatro fren– tes. O si se prefiere, digamos que cuatro son hoy los grandes problemas que proyectan la oscuridad do una grave amenaza sobre el vivir ruidoso, frecuente– mente convulsionado, de este mundo nuestro. 1. El problema dermográfico. Es de enorme envergadura; y debe tener solución dentro del orden que Dios ha querido. Pero ¿qué es lo que se intenta para solucionarlo? Esa antinatu– ral «limitación de la natalidad», por medios anticon– ceptivos, cuando no por execrables mutilaciones, o por el criminal procedimiento del aborto. La solución al problema no vendrá nunca por ahí; eso sólo puede desequilibrar aún más a las personas - 179 -
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz