BCCCAP00000000000000000000737
,de las estaciones y propone oraciones especia– les. Es muy semejante a la forma actual del Vía Crucis; difiere, sin embargo, en el número y orden de las estaciones. Merece recordarse también Cristiano Adri– comio (Kruick van Andrichem (i" 1585), que _publicó Theatrum Terrae Sanctae et Biblicarum historiarum, varias veces editado, y en Europa muy divulgado. No menciona las dos últimas estaciones, pero las doce primeras son como las actuales. Quizá haya tomado algo del fla– menco Paeschen (8). 5. Número de estaciones.-Hasta el siglo x no se encuentran divisiones de estaciones. Des– pués, el número es muy fluctuante hasta el si– glo xvm. El peregrino inglés Guillermo Wey cuenta ya 14 estaciones o paradas, en las cua– les se decían algunas oraciones. Hacia 1650, J. Andries, enumerando diversos Viacrucis en Bélgica, llega a contar 18 paradas. Viceme Gilberto, clérigo regular italiano, en los años 1634 y 1644, describió 11 estaciones en dos volúmenes, y añadió una más: la tumulación de Jesús. P. E. Pauck, O. F. M., en 1720, recuerda doce estaciones, a las cuales algunos añaden otras dos. P. Angélico Brinkmann, O. F. M., guardián del convento del Monte Mariano, cerca de Ful- (8) Cfr. ANTONINO, op, cit., pág. 20-21. - 75 -
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz