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DAME UN CAMINO ClJALQUIERA I quieres dwme alegría, dime un camino cualquiera; que a cualquier parte que vaya los caminitos me .'levan. Las calles de la ciudad entre las casas son sendas; senderos entre los árboles son las calles de las selvas. Debajo del puente el agua canta su sonata fresca y por el puente la vida canta el afán y la brega. Por el puente hay un camino y por el agúa una senda; el p'.lente lleva mis pasos el agua el alma me lleva. El puente por dance paw, testigos de tantas penas: del río de la ciudad y del río de la vega. FERMIN DE MIEZA (Español) ••• Y todas estas cosas que iba diciendo el hermano Maseo en su interior mientras caminaba delante, fueron reveladas por Dios a San Francisco. Por lo cual, acercándose a él, le dijo: -?rocura atenerte a las cosas que estás pensando ahora, porque son b-.1enas y provechosas e inspiradas po::- Dios; pero aquella prime– ra m1.:.rmuración que traías antes era ciega, vana y orgullosa, y fue el demonio quien te la puso en el ánimo. Entonces, el hermano Ma.seo, persuadido de que San Fran– cisco penetraba los secretos de su corazón, comprendió que el espíri-=u de la divina sabiduría dirigía al Padre santo en todas sus acc10nes. En alabanza de Cristo. Amén. ("Florecillas". Cap. XI) 121