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r88 - conseguir sus intenbs; ni la mentira, ni la hipocre– sía, ni la murmuración, ni el engaño, ni siquiera la misma calumnia son para él medios ilícitos: Por eso, con razón se ha <licio que la ambición es un veneno oculto, sentina de □aldad, muerte de las virtudes y madre de todos los vicios {1). 2 º-LA SIMONIA 294. Aunque reahnente no tenga gran aplicación, bién puede darse el ((munus· a lingua)) y también el <<munus ab obsequim., por ejemplo, ((Si me das el voto para Definidor, te haré Guardián)), etc., etc:. (2). 3.º-EL SOBORNO 295. Soborna.do·re.; llámanse en Derecho todos aque– llos que maliciosamente buscan votos para sí mismos o para otros. Nótese que hemos dicho ((maliciosamen– te», o sea, faltando a la verdad, porque es lícito por derecho natural y· es, además, prudente informarse debidamente sobre ks diversos candidatos que pueden ser elegidos. No es s::>borno condenado y malo el pon– derar las virtudes verdaderas y los vicios también ver– daderos que tiene c1=.da uno de los concursantes, con el fin de que se elija al más digno. Cuando, el Derecho prohibe con rigor el soborno antes de la elección, no prohibe el soborno bueno, conviene a saber, aquel con que se persuade y se procura que sea elegido el más digno, o el que es igualmente digno, porque esto antes importa a la Orden (3). El soborno prohibido consiste en procurar votos faltando a la verdad, por ejemplo, rebajando ías bue– nas cualidades de algunos electores, o atribuyéndoles (r) Cfr. Buls. n. 431. (2) Prümmer, cuest. 79. (3) P. M ur;fa, , cap. ,,XIV sobre el VIII de la Regla.– Verm.-Creusen: Ep1tom~ , I, n. 579.
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