BCCCAP00000000000000000000538

LA ESPERANZA CRISTIANA \ll prender cosas grandes. La magnanimidad la ayuda parn no cejar en la ejecución de las cosas grandes que ha emprendido. La paC'ien– cia la sostiene para no decaer de ánimo en las dificultades. La perseverancia la conforta para no desistir de la obra comenzada por la diu– turna fatiga. La humildad la enseña a descon– fiar de sí misma y a confiar en Dios que da su gracia a los humildes. La constancia le presta el tesón y continuidad en los trabajos empren– didos por el amor de Dios. A estas seis virtu– des afines a la esperanza se junta la audacia, la cual -como dice Santo Tomás de Aquino– sigue a la esperanza, "pues por lo mismo que uno espera superar una cosa terrible inminen– te, se lanza audaz contra ella" (41). (41) 1-2, q., 45; a., 2.