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2.-Gristo modelo: ha venido para enseñarnos con sus palabras y vida lo que tenemos que hacer para agradar ai Padre Cuando les habla de la promesa de la Eucaristía como prenda de vida eterna y de su labor redentora, añade: «He bajado del cielo no para hacer mi voluntad, sino la de Aquél que me ha enviado». (Jn 6, 38). Y cuando los discípulos se admiran, junto al pozo de Jacob, que Jesús no coma con ellos de los alimentos que había ido a buscar, les dice: «Yo tengo otro alimento que vosotros no conocéis ... Mi ali– mento consiste en hacer la voluntad del que me ha enviado y en llevar a cabo su obra». (Jn 3, 32-34). Y a los fariseos: «Cuando hayáis levantado en alto al Hijo del hombre, entonces conoceréis que soy yo, y que por mi cuenta no hago nada, sino conforme me enseñó el Padre, así hablo. Y el que me ha enviado está conmigo; nunca me ha dejado solo, pues yo hago siempre lo que le agrada». (Jn 8, 28-29). 3.-Manifiesta su amor al Padre y a los hombres de diversas maneras 32 a) En cuanto al Padre: - manteniendo la unión con El por medio de la oración: los cuarenta días en el desierto; retirándose, unas veces a solas, otras con sus discípulos al huerto o lugares apartados ... (Me 1, 12; 1, 35), (Le 5, 16). - y, sobre todo, cumpliendo perfectamente su voluntad. (Jn 8, 29). b) En cuanto a los hombres: - enseñándoles a orar (Le 11, 1-13), (Mt 6, 5-13) - llamándoles a su intimidad y seguimiento (Mt 4, 18-22), (Le 5, 27; 19, 18-23) - no transigiendo con el mal, ni dejándose ganar por el di– nero, la vanagloria, la política o el poder humano (Le 4, 1-43), (Jn 6, 14-66) - venciendo el respeto humano y hablando y obrando con libertad santa (Mt 22, 16) - predicando y practicando la pobreza de espíritu y efectiva, la mansedumbre, la'justicia individual y social, la paz, la mise– ricordia, la rectitud y limpieza de corazón , la paciencia y