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LA INSTRUCCION EN VENEZUELA.—CAPITULO VI 307 "En la ciudad de Santiago (le León, provincia de Caracas, India y Tierra firme del Mar Océano, a 9 dias del mes de febrero de 1594, se juntaron a hacer Cabildo, según lo han de uso y costumbre en las Casas Reales, que para ello están edificadas, para tratar cosas con- venientes al servicio del Rey, Nuestro Señor, y bien de esta Repúbli- ca, conviene a saber: El capitán Sebastián Díaz y Guillermo de Lo- reto, alcaldes ordinarios; Francisco de Uvierna, Antonio Rodríguez, Alonso Andrea, Nicolás de Peñalosa y Jerónimo de Antequera,regi- dores cada-añeros; y lo que en este Cabildo se proveyó por ante mi, Alonso García Pineda, fué lo siguiente.....En este Cabildo pareció Simón de Vazauri, maestro de escuela, y presentó la petición siguiente: "Simón de Vazauri, estante en esta ciudad de Santiago (le León, digo: que había diez días, poco más o menos, que yo puse en esta ciudad escuela para enseñar a leer y escribir y contar, u, por haber poca gen- /e en esta Ciudad y acudir pocos muchachos a ser enseñados, y la mitad de los que acuden ser pobres y no pueden pagarme, y los en- seña por amor de Dios, y por esta razón yo no me puedo sustentar, usando dicho oficio de maestro, con lo que los muchachos me pagan, y a esta Ciudad se le sigue notable provecho que en ella haya maestro su- ficiente para enseñar a leer, escribir y contar, y que atienda a ello con las veras necesarias: Si vuestras mercedes no me hacen merced de señalarme algún salario para aguda de costa, atento que yo no me puedo sustentar con sólo lo que los muchachos me dan, respecto de ser pocos, pretendo a no usar el dicho oficio. A vuestras mercedes pido y suplico sean servidos de mandarme señalar salario para ayuda (le costa por cada un año que usare (le dicho oficio de maestro, por- que, además de hacerme merced a mi, la República recibe notable provecho, porque de no señalarme ayuda de costa yo pretendo dejar el oficio, y no ha de haber en la Ciudad quien lo haga como yo; y en lo hacer como pido, además del provecho que se le sigue a la Ciudad, lo recibiré yo en particular merced.—Sirnón de Vazauri". Y vista la dicha petición por el Cabildo, Justicia y Corregimiento di ron que señalaban, y se señalaron, al dicho Simón cia Vazauri, maestro, veinte pesos de oro fino, de ayuda de costa, por un año, los cuales se le pagaron, no habiendo otra cosa del estanco del vino..... Con esto, se cerró este Cabildo, y lo firmaron (le sus nombres, Sebas- tián Díaz, Guillermo Loreto, Francisco Gómez de Uvierna, Antonio Rodríguez, Lorenzo Andrea, Nicolás de Peñalosa y Jerónimo de An- tequera,'. En una Real Cédula de 1600 se lee que los religiosos de. San Francisco tenían en la provincia (le Caracas ocho doctri- nas; en ella mandaba el Rey a los oficiales que diesen a los religiosos doscientos pesos para la cátedra de gramática (1). (1) Mons. Navarro. Apuntes de la Historia Eclesiástica de Vene- zuela cit., pág. GO.