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252 LOS FRANCISCANOS CAPUCHINOS EN VENEZUELA Indios Guaraunos, Capitán, Buanaria, con tres mujeres y tres hijos. Capitán segundo, Aticoro, su mujer y (los hijos. Capitán tercero, Turainabare, con tres mujeres y tres hijos. Alcalde, Julián, su mujer y un hijo. Ayudante, Francisco, su mujer y dos hijos. Fiscal, Damián y su mujer. Fiscal segundo, Manuel y su mujer, etc. (Siguen nombres hasta dar un total (le doscientas ochenta y cuatro almas). Este pueblo se fundó el año de 1770, tiene por fondos de comuni- dad cuatro almudez de yuca y diez de maíz sembrados en este presen- te año, y algún otro en troje del pasado; una iglesia interina, cubierta de moriche; una casa Real de Alto, cubierta de teja, otra que sirve (le habitación para el religioso Misionero, cubierta también de teja. Estos indios son sacados de los caños de las bocas del Orinoco, y aunque en su regular conducta manifiestan fidelidad y amor a los españoles, son traicioneros y amigos de la ociosidad, porque siempre han vivido en sus tierras con poco afán y trabajo; por esta causa, y por apetecer, como otro cualquiera la libertad, hay frecuentes deserciones, ahora en los principios; pero si son tratados con caridad podrá ser que se aquieten en los pueblos, mas para esto faltan los medios. Asisten al rezo los de quince años para abajo, porque para los de- más no hay esperanza de religión, sino que para cada uno hubiera un Misionero, y aún así lo (ludo. Los fondos de comunidad que tiene este pueblo, por razón de su reciente fundación, apenas alcanzan a subve- nir a sus necesidades públicas. Soy de dictamen que, para su mejor permanencia, se incorporen algunas familias españolas, pues la expe- riencia enseña que con su trato se despeja el indio de su torpeza y se civiliza e instruye en cuanto se ofrece.—Buenavista, junio 3 (le 1775. Fr. Francisco Ardite, ministro del pueblo. Padrón de los indios del pueblo de San Francisco Solano de Pla- tanal, fundado el año de 1755. Capitán, Pedro José Bolívar, de setenta años, su mujer y tres hijos. Sargento, Mauro Marzo, su mujer y una hija. Juan de la Cruz Maraipe, (le treinta y un años, su mujer y dos hijos, etc. (Siguen nombres hasta formar un total de doscientas diez y ocho almas). Cada una (le las familias contenidas en este padrón tiene su la- branza, una o dos bestias, y la mayor parte (le ellas su casa; y con todo esto, tiene esta nación Caribe tan poca utilidad y asiento, que los dichos haberes no les sirven de freno para contenerlos, y cuando les parece lo dejan todo y se mudan a otros pueblos. De lo que resulta no poderse lograr en estos indios la debida sujeción y subordinación a